- marzo 30, 2021
No se vislumbra el final de la trampa en la que se encuentra nuestro banco central. Porque sin las compras masivas e indiscriminadas de la Fed, nuestras subastas del Tesoro fracasarían. Es decir, los compradores privados sólo aparecerían después de un súper pico en los rendimientos; pero eso haría que el gobierno fuera insolvente, junto con los bonos de todo el espectro de renta fija.